Acantilado de Bandiagara (Tierra de los Dogones)
Valor universal excepcional
Breve síntesis
El acantilado de Bandiagara, Tierra de los Dogones, es un vasto paisaje cultural que cubre 400, 000 ha e incluye 289 pueblos repartidos entre las tres regiones naturales:meseta de arenisca, escarpa, llanuras (más de dos tercios del perímetro enumerado están cubiertos por mesetas y acantilados).
Las comunidades en el sitio son esencialmente los Dogon, y tienen una relación muy estrecha con su entorno expresada en sus rituales y tradiciones sagrados.
El sitio de la Tierra de los Dogones es una región impresionante de características geológicas y ambientales excepcionales. Asentamientos humanos en la región, desde el Paleolítico, han permitido el desarrollo y la integración armoniosa en el paisaje de culturas ricas y densas, tangibles e intangibles, las más conocidas de las cuales son las de los Tellem, que se cree que viven en las cuevas, y el Dogon.
Este medio hostil y de difícil acceso ha sido, desde el siglo XV, un refugio natural que correspondía a la necesidad de defensa de los dogones frente a formidables invasores. Atrincherado en la meseta y colgando de los acantilados, los Dogon pudieron conservar su cultura y tradiciones centenarias, gracias a este refugio defensivo. La arquitectura de la tierra Dogon se ha adaptado para beneficiarse de las limitaciones físicas del lugar. Ya sea en el altiplano, los acantilados, o en la llanura, los Dogon han explotado todos los elementos disponibles para construir sus aldeas que reflejan su ingenio y su filosofía de vida y muerte.
En determinadas áreas culturales, las aldeas Dogon comprenden numerosos graneros, en su mayor parte cuadrados con un techo ahusado de paja. La gin'na, o casa de familia numerosa, Generalmente se construye en dos niveles. Su fachada construida a partir de banco, no tiene ventanas pero tiene una serie de nichos y puertas, a menudo decorado con motivos esculpidos:filas de personajes masculinos y femeninos que simbolizan las sucesivas generaciones de la pareja.
Una de las formas más características de la Tierra de los Dogon es la del togu-na, el gran refugio, una construcción larga que proporciona refugio bajo un techo de ramas sostenidas por postes de madera de forma tosca, para una plataforma con bancos para los hombres.
Los santuarios totémicos (binu), lugares privilegiados, son de una gran variedad:algunos, en cuevas, mantener vivos los lugares de culto de los Tellem; otros, construido de banco, parecerse a las casas. Los más venerados son responsabilidad del Hogon, el sacerdote de uno o varios pueblos que vive solo, su fuente de inspiración es la serpiente, Lèbe, cuyo tótem a menudo se esculpe cerca de la puerta de su vivienda.
La irrupción de nuevas «religiones escritas» (Islam y cristianismo) desde al menos el siglo XVIII ha contribuido a la vulnerabilidad del patrimonio que hoy ha sufrido los efectos negativos de la globalización vinculados al creciente desarrollo del turismo cultural y los fenómenos de la economía rural. éxodo, consecuencia de la sequía de las últimas décadas.
Criterio (v):La Tierra de los Dogon es la manifestación sobresaliente de un sistema de pensamiento vinculado a la religión tradicional que se ha integrado armoniosamente con el patrimonio arquitectónico. muy notablemente en un paisaje natural de pedregal rocoso e impresionantes características geológicas. La intrusión de nuevas religiones escritas (Islam y cristianismo) desde al menos el siglo XVIII ha contribuido a la vulnerabilidad del patrimonio que hoy sufre los efectos adversos de la globalización.
Criterio (vii):El acantilado y su pedregal rocoso constituyen un área natural de belleza única y excepcional en África Occidental. La diversidad de características geomorfológicas (meseta, acantilados y llanuras) del sitio se caracterizan por la presencia de monumentos naturales (cuevas, dunas secundarias y abrigos rocosos) que dan testimonio de la continua influencia de los diferentes fenómenos erosivos. También es en el medio natural donde se encuentra la planta endémica Acridocarpus monodii, su área de crecimiento se limita a los acantilados, y plantas medicinales específicas utilizadas por los terapeutas y curanderos Dogon. Estas plantas sufren un declive gradual debido al cambio climático (sequía y desertificación) y la tala. La relación del pueblo Dogon con su entorno también se expresa en los rituales sagrados que asocian espiritualmente al zorro pálido, el chacal y el cocodrilo.
Integridad
Debido a los fenómenos socioeconómicos (éxodo, escolarización, desarrollo de infraestructura), actividades humanas y la degradación del medio ambiente (cambio climático que provoca sequías, desertificación o también lluvias torrenciales; presión demográfica), las poblaciones están abandonando las aldeas ubicadas en los escarpes escarpados hacia la llanura. Algunas prácticas culturales intangibles sufren mutaciones vinculadas al contacto con otros sistemas de valores importados (religiones, Turismo cultural...). La integridad de esta propiedad tan extensa es, como consecuencia, amenazado porque varios sectores ya no contienen todos los atributos del Valor Universal Excepcional.
Autenticidad
Las tradiciones sociales y culturales de los Dogon se encuentran entre las mejor conservadas del África subsahariana. a pesar de ciertas importantes mutaciones socioeconómicas irreversibles. Los pueblos y sus habitantes son fieles a los valores ancestrales ligados a un estilo de vida original. La integración armoniosa de elementos culturales (arquitectura) en el paisaje natural sigue siendo auténtica, excepcional y único. Sin embargo, las prácticas tradicionales asociadas a las viviendas y las construcciones de edificios se han vuelto vulnerables, y en algunos lugares la relación entre los atributos materiales y el Valor Universal Excepcional es frágil.
Requisitos de protección y gestión
La propiedad está inscrita en el patrimonio nacional por el Decreto n ° 89 - 428 P-RM de 28 de diciembre de 1989 como santuario natural y cultural. También son aplicables la Ley que regula la explotación forestal (N ° 68-8 / AN-RN de febrero de 1968) y la Ordenanza N ° 60 / CMLN de 11 de noviembre de 1969 relativa a la caza. El Ministerio de Cultura de Malí, el organismo general responsable de la protección de la propiedad, ha delegado la gestión a la Misión Cultural de Bandiagara. La Misión Cultural de Bandiagara ha elaborado un plan de gestión y conservación del sitio (2006-2010). Este plan requiere la implementación de actividades relacionadas con programas integrados de conservación. Destaca la mejora de las condiciones de vida de las comunidades, portadores de los valores patrimoniales del lugar.
Para una gestión sostenible y eficaz del sitio, Se da prioridad a la implementación de programas inscritos en el plan de manejo y conservación del sitio. Este plan exige la correlación de la gestión del patrimonio y el desarrollo de la economía local. La Tierra de los Dogon es un lugar vivo, pero frágil, y ciertos valores importantes solo pueden preservarse teniendo en cuenta el bienestar de las comunidades locales, traducido por la implementación de proyectos específicos de desarrollo e infraestructura (por ejemplo, la provisión de agua a los sitios elevados y la mejora económica de los recursos patrimoniales).
Es fundamental evaluar la implementación del plan de manejo para identificar mejor las preocupaciones de las poblaciones y los órganos responsables de las comunidades territoriales descentralizadas.
Otra preocupación es la necesidad de revisar la lista del sitio. Cualquier revisión de los límites debe reflejar las vulnerabilidades de ciertas partes de la propiedad en términos de autenticidad e integridad.
