Víctor Mikhailovich Vasnetsov (1848-1926)
Viktor Mikhailovich Vasnetsov, un pintor talentoso, decorador, ilustrador y arquitecto, se convirtió en el fundador de nuestro especial "estilo ruso", creado en la unión del género histórico y las tendencias románticas, inspirado en el folclore y el simbolismo. Vasnetsov tuvo un gran impacto en la evolución de las bellas artes rusas en la era de la transición del vagabundo a la modernidad.
Sacerdote hereditario
Viktor Vasnetsov nació el 15 de mayo de 1848 en el pueblo de Lopyal, Provincia de Vyatka. El padre del futuro artista, Mikhail Vasnievich Vasnetsov, era un sacerdote hereditario. Dos años después del nacimiento de Víctor, el sacerdote recibió una parroquia en el pueblo de Ryabovo, ubicado en el mismo condado. Estaba alli, en el futuro, que pasó la infancia del pintor. La familia del cura del pueblo vivía, como el resto de los campesinos, pobre y simplemente. Víctor tenía cinco hermanos, ya que su madre murió muy temprano, todos juntos ayudaron a su padre a administrar la casa.
Siendo una persona bien educada, El padre Mikhail se esforzó por brindar a todos sus hijos una educación versátil. Les enseñó alfabetización y aritmética, y también trató de desarrollar en ellos una mente inquisitiva y de observación. A los Vasnetsov les encantaba leer revistas científicas, participar en tallas de madera, y pintar con acuarelas.
La dura naturaleza una forma de vida separada, creencias populares, costumbres antiguas, los cuentos y las canciones del pueblo de la dura región de Vyatka formaron tanto la vida como la cosmovisión artística del futuro artista. Víctor y su hermano Apolinario (también dedicado a la pintura) absorbieron esta atmósfera fabulosa de "las tradiciones de los viejos tiempos, ”Que luego se convirtió en la principal característica de su trabajo.
Según la tradición familiar establecida, todos los hijos de la familia Vasnetsov tuvieron que continuar el trabajo de sus antepasados y convertirse en sacerdotes. Por lo tanto, en 1858, Mikhail Vasilievich envió a su hijo mayor Víctor a una escuela religiosa, que se graduó en 1862, luego pasando a la clase del Seminario Teológico de Vyatka.
Allí, además de las escrituras, también estudió iconografía. El artista N. A. Chernyshev impartió lecciones de pintura eclesiástica a los seminaristas. que tenía un taller de pintura de iconos en Vyatka. Vasnetsov pasó mucho tiempo con su maestro, visitó el museo de la ciudad e hizo muchos bocetos. Más tarde, en la casa de Chernyshev, conoció al artista polaco exiliado Elviro Andriolli, quien se convirtió en un verdadero amigo y mentor del joven Víctor. Bajo su liderazgo, Vasnetsov escribió sus primeras obras. También fue su asistente oficial, participando en la pintura del templo construido en Vyatka. Andriolli le contó al joven sobre la Academia de Artes de San Petersburgo, de donde salieron muchos pintores rusos famosos. Vasnetsov, que soñaba con pintar, decidió probar suerte y aprobar los exámenes de ingreso a esta institución educativa.
Vasnetsov no tenía fondos para viajar a la capital, y luego Andriolli, con la ayuda de su compatriota, Profesor Krasinsky, organizó una lotería para ciudadanos ricos, durante el cual se vendieron dos obras amateurs de jóvenes talentos. Por lo tanto, habiendo recibido un poco de dinero, el joven dejó el penúltimo curso en el seminario y, con la bendición de Mikhail Vasilievich y el rector, se fue a Petersburgo.
Llegada a Petersburgo
En 1867, Vasnetsov aprobó con éxito los exámenes de ingreso en la Academia de Artes de San Petersburgo, pero por dudas sobre sus propias habilidades, ni siquiera reconoció el resultado. Confiado en el fracaso Víctor vagó por la ciudad en busca de trabajo y vivienda. Decidió a toda costa quedarse en San Petersburgo para intentar ingresar a la academia el próximo año.
Habiendo conocido accidentalmente al hermano de su benefactor, el profesor Krasinsky, el joven con su apoyo recibió el cargo de dibujante en la institución cartográfica de la capital. Al mismo tiempo, comenzó a asistir a la Escuela de la Sociedad para el Fomento de los Artistas en el Intercambio. Fue allí donde conoció al joven maestro I.N. Kramskoy y sus compañeros, estudiantes de la Academia, el pintor I. E. Repin y el escultor M. M. Antokolsky.
En el verano del próximo año, Vasnetsov, sentirse seguro de sus propias habilidades, nuevamente fue a tomar exámenes de ingreso en la Academia de Artes. ¡Imagínese su sorpresa cuando le informaron que estaba inscrito en estudiantes de la institución el año pasado! Durante su primer año de estudio, Viktor recibió un premio bien merecido:una medalla de plata. El joven se hizo amigo cercano de jóvenes artistas talentosos V.D. Polenov, AI. Kuindzhi, V.I. Surikov y otros. Hizo frente con éxito a todas las tareas y se destacó por su trabajo de estudiante por el famoso profesor P.P. Chistyakov. Ya durante sus estudios, Vasnetsov tenía buenas órdenes de los editores para realizar dibujos para varias obras:historias cotidianas, alfabetos y cuentos de hadas.
El destino obligó a Víctor a dejar la academia por un tiempo. En 1870, falleció el padre del artista, y tuvo que irse a Ryabovo para cuidar de sus hermanos. Víctor regresó a la capital no solo, pero con su hermano menor, Apollinaris.
Estos cambios significaron que ahora el estudiante Vasnetsov tuvo que trabajar aún más duro para mantener de alguna manera a su hermano. Debido a esto, comenzó a asistir a clases en la Academia de manera irregular, y pronto abandonó completamente las conferencias y lecciones. Como resultado, Víctor ni siquiera tomó los exámenes finales y en 1874 recibió un certificado administrativo que decía que "estaba entre los estudiantes de la Academia".
Habiendo estado involucrado profesionalmente en gráficos de libros desde 1868, Viktor Vasnetsov logró un gran éxito en esta área en 1875. Decidió unirse a la recién creada “Asociación de exposiciones itinerantes de arte” para probar suerte en el realismo crítico. Esta sociedad estaba formada por maestros que, llevado por las ideas de la gente, trató de mostrar en sus obras la dura vida de los campesinos y habitantes pobres, así como los principales problemas sociales del país.
Las nobles intenciones y las opiniones avanzadas de la Asociación fueron apoyadas calurosamente por la intelectualidad rusa. La asociación incluía Kramskoy, Repin, Polenov, Kuindzhi, Surikov y muchos otros artistas famosos. Victor Mikhailovich, que había sentido desde su niñez lo que era el trabajo campesino, después de mudarse a Petersburgo todos los días, observaba la vida de los ciudadanos pobres. Escribió una serie de obras en sintonía con los temas de la obra de los Wanderers. Se trata de obras como la "Librería" (1876, la Galería Estatal Tretyakov, Moscú), “Beggar Singers (Bogomolets)” (1873, el Museo de Arte Regional de Kirov que lleva el nombre de V.M. y yo. Vasnetsov) y "C apartamento a apartamento" (1876, Galería estatal Tretyakov, Moscú). Estas composiciones de múltiples figuras transmiten perfectamente toda la amargura y la verdad instructiva de la vida, y los retratos folclóricos presentados en ellos demuestran el alto nivel artístico del maestro. Pero el pintor sintió agudamente una falta de conocimiento, e inmediatamente respondió a la invitación de Repin para venir a París. Repin a sí mismo, ser un brillante graduado de la Academia de Artes, viajó a Europa a expensas de la institución educativa.
Y entonces, en marzo de 1876, Vasnetsov, quien simultáneamente recibió un pedido de una ilustración para el libro de E. N. Vodovozova, “La vida de los pueblos europeos, ”Partió hacia Francia.
Búsqueda creativa
Llegando a París casi sin dinero, pero apoyado por otros artistas, Viktor Mikhailovich comenzó a estudiar meticulosamente la colección del Louvre y a seguir los descubrimientos impresionistas de los jóvenes pintores franceses.
La influencia de los impresionistas se siente claramente en la imagen que creó en Francia, "Acróbatas de vacaciones en los alrededores de París" (1877, Galería estatal Tretyakov, Moscú). La bailarina de plástico alargada en el lado izquierdo de la imagen parecía haber salido de las obras de la serie de ballet de Edgar Degas. En la primavera de 1877 Vasnetsov exhibió esta obra en el Salón anual de París, no habiendo logrado mucho éxito. Después de regresar a Rusia un año después, el artista presentó Acrobatov en la próxima exposición de Wanderers. Emperador Alejandro III, habiendo visto esta foto, lo adquirió para su colección. En noviembre del mismo año, el pintor se casó con una compatriota, un nativo de la provincia de Vyatka, Alexandra Vladimirovna Ryazantseva. Después de graduarse de cursos de medicina femenina en la academia médica y quirúrgica de la capital, una chica modesta y educada se dedicó por completo a su familia. Y en 1878, Vasnetsov fue admitido oficialmente en las filas de la Asociación de Errantes. Luego, después de Repin y Polenov, Vasnetsov, junto con su esposa y su hermano, se mudó de San Petersburgo a Moscú.
Innumerables templos y el espíritu patriarcal de esta antigua ciudad, sus diversas chozas, palacios y mansiones asombraron al pintor hasta la médula. Esbozó con entusiasmo el Kremlin, varios monasterios e iglesias de Moscú.
Pronto, el artista recibió una orden del etnógrafo V. A. Dashkov, el ex director del Museo Público y Rumyantsev de Moscú, para crear una serie de retratos de figuras rusas famosas a partir de grabados históricos conservados. Entre las imágenes escritas por el maestro se encontraban figuras históricas como el patriarca Germogen II, maestro de Peter I N. M. Zotov, Príncipe D. M. Pozharsky y F. Ya. Lefort. Gracias a este trabajo, Viktor Mikhailovich estaba cada vez más inmerso en la atmósfera de la tradición y la antigüedad. Tuvo la oportunidad de tocar las reliquias históricas, sumérjase en la atmósfera inusual de los siglos pasados.
El famoso filántropo e industrial moscovita S. I. Mamontov jugó un papel importante en la vida de Vasnetsov, una persona talentosa y educada que le gustaba el arte y la historia. En "Abramtsevo" - la finca de Mamontov cerca de Moscú, artistas científicos y escritores se reunían a menudo, a menudo discutiendo varios eventos históricos, leyendo manuscritos antiguos encontrados recientemente por arqueólogos. Todo esto llevó a Vasnetsov, que se había enamorado de una conferencia del seminario "La palabra sobre la campaña de Igor, ”Para escribir una serie de pinturas épicas históricas. La primera obra del ciclo fue la imagen "Después de la batalla de Igor Svyatoslavich con Polovtsy" (1880, Galería estatal Tretyakov, Moscú).
En el lienzo vemos los cuerpos de héroes rusos golpeados por lanzas y flechas enemigas, tumbado bajo un cielo opaco sobre una alfombra de hierba verde. Y sobre ellos como si luchara por las almas de los justos caídos, buitres de alas largas, que son un símbolo de la maldad, pelear. Los rostros de los héroes muertos son serenos y severos. El centro de toda la composición era un joven príncipe atravesado por una flecha en el pecho. El motivo del coraje y el heroísmo en la lucha contra los conquistadores fue creado por varios acentos rojos alarmantes. Cabe señalar que el pintor realizó todos los detalles históricos del trabajo:armas, armadura, y otras cosas de los caballeros de forma fiable y precisa, gracias al minucioso estudio de la exposición del Museo Histórico. Adornos exhibidos en el lienzo, como un bordado en la camisa blanca del príncipe o una capa de guerrero decorativa a su derecha, transmitir la atmósfera de cuentos épicos. El paisaje de la tarde con un sol poniente apagado y oscuro, como sombras de tumba, presionando desde el horizonte, está en armonía con los trágicos acontecimientos del cuadro. El sentimiento de heroísmo la grandeza de los soldados rusos y el anhelo mortal se ve reforzada por la exhibición de un amplio plan, donde entre el denso verdor de la hierba el maestro exhibía margaritas caídas, campanas de campo caídas y acianos arrugados. Son ellos quienes dan una nota lírica romántica a toda la obra.
Pero los críticos contemporáneos del artista condenaron este trabajo. Ella provocó una reacción ambigua entre la audiencia, que esperaba del nuevo pintor moscovita muy diferente, Trabajos ideológicos y morales sobre complots campesinos. Sólo unos pocos, incluido un buen amigo de Vasnetsov Repin y profesor de la Academia Chistyakov, Apreció el espíritu grandioso y original en el lienzo, capaz de agitar el alma rusa y hacerla sentir empatía y orgullo.
Cuentos de hadas y epopeyas
Una reacción no demasiado positiva a la obra "Después de la batalla de Igor Svyatoslavich y el Polovtsy" no pudo obligar al maestro a abandonar la idea de crear una serie de pinturas épicas históricas. Cada vez más en el trabajo del artista fue una fascinación por los descubrimientos arqueológicos, antigüedad y folclore nacional. La obra "Alfombra-avión" (1880, Museo de Arte de Nizhny Novgorod), creado para el estudio de S. I. Mamontov, fue escrito sobre un tema de cuento de hadas, y apoyado a las personas superdotadas de todas las formas posibles.
En el trabajo, los motivos de los cuentos rusos y árabes están maravillosamente entrelazados. Sobre una alfombra oriental brillante cubierta con viejos patrones rusos, Ivan Tsarevich barre con orgullo los densos bosques, pantanos y ríos, iluminando su camino con una linterna gigante. Esta es una imagen de una locomotora de vapor inventada por extranjeros y utilizada para iluminar y allanar el camino para una persona rusa en el todoterreno habitual. Tal comparación no es accidental:en ese momento, el propio Mamontov supervisó la construcción y operación de las líneas norte y sur de los ferrocarriles rusos.
El pintor pudo transmitir de manera confiable la textura de un lujoso, traje de zarevich con forro de seda, una pila de alfombra estampada y el grueso vidrio de una linterna encendida, detrás de la cual con una mirada atenta no se ve ni una llama, pero un pájaro de fuego, batiendo sus alas doradas.
En el verano, los Vasnetsov alquilaron la finca Akhtyrka, ubicado no lejos de Abramtsevo, así que pasaron mucho tiempo con la familia Mamontov. Los hermanos-artistas a menudo caminaban por el bosque, donde el mayor reflexionó sobre la trama del cuento de hadas ruso sobre “La hermana Alyonushka y el hermano Ivanushka”. Allí trabajaron constantemente al aire libre. La naturaleza cerca de Moscú causó una impresión romántica y fabulosa en Viktor Mikhailovich, aquí vio no solo un paisaje magnífico para su trabajo futuro, pero también su propia heroína.
Fue así:una vez en un sendero del bosque, un artista se encontró con una chica local con el corazón roto cuyos ojos estaban tan tristes que Vasnetsov se dio cuenta de inmediato de que frente a él estaba "la misma" Alyonushka.
El maestro hizo varios bocetos de un pequeño, campesina descalza que se apretujaba en una bola. El trabajo en sí llamado "Alyonushka" (1881, Galería estatal Tretyakov, Moscú), Vasnetsov creó ya en el taller de Moscú. Una chica rubia sentada en una piedra junto al estanque pensó en su amargo destino. El cielo gris pálido álamos voladores, Las “garras” espinosas de los árboles de Navidad y la superficie oscura del estanque con hojas amarillas flotando sobre él transmiten perfectamente su estado depresivo.
La gruesa superficie de la piscina no refleja la heroína anhelante, pero como si la atrajera hacia sí misma. Flechas de hierba que "pegan" al depredador del agua, como si estuviera listo para perforar su cuerpo y brazos. El maestro no solo escribió una imagen artística lírica de un cuento de hadas sobre su hermana Alyonushka y su hermano Ivanushka, él mostró inusualmente conmovedor en el lienzo el alma sufriente del pueblo ruso. Y otra vez, presentado en la Novena Exposición Itinerante, la imagen causó una impresión ambigua. Los visitantes de la exposición expresaron unánimemente su admiración por el asombroso regalo del artista, pero críticos, incluido el famoso conocedor de arte y filántropo P. M. Tretyakov, hizo comentarios bastante cáusticos.
Visitando constantemente a Mamontov en su finca, Vasnetsov pronto se interesó por el trabajo arquitectónico. El filántropo decidió construir una iglesia en casa en el territorio de su parque e invitó a sus compañeros artistas a desarrollar un proyecto para ella. Polenov recomendó a Savva Ivanovich que tomara la Catedral de Novgorod del Salvador Nereditsky como estándar. Vasnetsov, habiendo competido con su colega, creó su boceto del templo en el espíritu de la arquitectura de Moscú. Fue este desarrollo arquitectónico lo que más agradó a Mamontov y su familia.
Pronto, el artista, con el apoyo de los habitantes, invitados y patrocinadores de Abramtsevo, construyó una Iglesia del Salvador de una sola cúpula no hecha por manos en la finca (1881 -). La aparición de una pequeña estructura de piedra blanca asociada con el campanario, varias escuelas de arquitectura conectadas a la vez. Decorado con mayólica, como los templos de Yaroslavl, y una cornisa con dibujos tallados debajo del arco del techo, como la mayoría de las catedrales de Vladimir, la iglesia tiene ventanas ovaladas en el espíritu de la arquitectura de Moscú.
Los amigos de Mamontov también crearon iconos y un iconostasio:los pintores Polenov, Repin y, naturalmente, el autor del proyecto. Además del templo, Vasnetsov construyó en Abramtsevo un cenador de parque inusual en forma de una verdadera "choza con patas de pollo", lo que llevó a los hijos del dueño de la finca a un deleite indescriptible.
Pero la mente de Viktor Mikhailovich estaba constantemente ocupada con la idea de un ciclo histórico-épico de pinturas. La obra "El caballero de la encrucijada" (1882, Museo Estatal Ruso, San Petersburgo), el artista concibió hace muchos años. La creación de este trabajo a gran escala requirió que Vasnetsov estudiara cuidadosamente no solo la exposición completa de la Armería del Kremlin de Moscú, pero también libros antiguos de la biblioteca pública.
El lienzo "El caballero de la encrucijada" no es solo un intento de retratar a un héroe épico, pero también la creación de un verdadero carácter nacional ruso en toda su belleza y fuerza. El guerrero del pintor se sienta en el caballo de un héroe cansado. Él mira con tristeza el peñasco "canto rodado", la antigua inscripción eslava dice:"si vas derecho, nunca estarás a pie o a caballo ”. La continuación de la famosa frase de las leyendas rusas -“ vas a la derecha para casarte ”y“ a la izquierda - rico ”no son visibles para el espectador:su maestro los escondió bajo el musgo que cubre la parte inferior de la piedra. El caballero solitario bajó con cansancio su lanza y, previendo lo inevitable, mira a su alrededor los huesos y cráneos de soldados muertos que yacen en el campo de batalla. Para él, se cierran las tentaciones de otros caminos, solo hay un camino directo por delante:perecer, defendiendo la Patria. El psicológico Los significados filosóficos de la obra asombraron a los contemporáneos.
Amor por la historia
Al mismo tiempo, en 1882, Vasnetsov, estudiando con entusiasmo la historia y el folclore domésticos, recibió un nuevo pedido para el desarrollo y construcción de un friso pintoresco para el edificio del Museo Histórico de Moscú. El director de construcción y presidente de la Sociedad Arqueológica de Moscú, A. S. Uvarov, propuso que el pintor mostrara las ocupaciones características de un hombre primitivo en un boceto. Vasnetsov buscó inmediatamente el consejo de antropólogos y etnógrafos. Pronto aparecieron en su taller un hacha de la edad de piedra y un colmillo de mamut real. Como modelos de gente primitiva, el artista fue posado por sus jóvenes colegas V. A. Serov y K. A. Korovin, que también visitaba a menudo Mamontov.
El maestro dividió condicionalmente la composición del friso en dos partes. El primero - "Edad de Piedra" (1882, Museo Estatal de Historia, Moscú):muestra el estacionamiento de personas de la era Paleolítica. Vemos una cueva en la entrada de la cual están sentados los adolescentes, raspando cuchillos de piedra, colmillos de mamut y puntas de flecha. En el centro del grupo hay un anciano tribal de pelo gris y peludo que hace fuego golpeando trozos de silicona. Otro adolescente parado a la izquierda, tirado de una cuerda de arco, con la esperanza de dispararle a un pájaro que pasa volando. A la derecha se encuentra la heroica figura musculosa del cazador jefe con un manto de piel de mamut, en una mano sostiene una lanza, en el otro, un hacha de piedra.
La mirada belicosa e intensa del líder sugiere que está preocupado por la protección de la tribu de la invasión de extraños. Una interpretación increíblemente confiable de todas las imágenes le permite a Vasnetsov convencer al espectador de la realidad del momento. El color de esta obra se basa en una delicada combinación de ocres cercanos, marrón, colores gris azulado y verdoso. La estructura monocromática de la obra "anima" los acentos brillantes casi negros distribuidos con precisión en el plano. El friso creado por el artista dejó una impresión imborrable no solo en sus amigos, pintores, sino también sobre P. P. Chistyakov, profesor de la Academia de las Artes de Petersburgo, y profesor en las universidades de San Petersburgo y Kiev, restaurador e historiador del arte A.V. Prakhov, que observaba atentamente su trabajo.
Este último invitó a Vasnetsov a participar en la pintura del interior de la iglesia de la nueva Catedral de San Vladimir, que se estaba construyendo en Kiev, pero se negó. Pero el maestro presentó a todos para mostrar la siguiente obra épica de cuento de hadas "Tres princesas del inframundo" (1884, Museo Estatal de Arte Ruso, Kiev). La trama de esta pintura se basó en la historia de Ivanushka, quien descendió del reino de los muertos (subterráneo) en busca de su madre. Allí, el héroe conoció a tres hermosas niñas que encarnaban la riqueza del interior de la tierra, oculto a la gente:oro, Piedras preciosas y cobre. El artista reemplazó la imagen tradicional de la niña-Cobre con el Carbón, que representa la energía del movimiento y el calor.
Estas fabulosas princesas y traídas a la luz de Dios desde el calabozo de Iván. La arrogante niña-Gold, como debería, está representada con un vestido de brocado brillante y un kokoshnik adornado con perlas rosas. Chica - Una joya se encuentra en un vestido de verano de color burdeos, bordado con zafiros, esmeraldas y jaspe. Su cabello y sus pechos son joyas enormes y pesadas. A diferencia de sus hermanas, la niña - Coal se presenta con un estricto vestido negro y el pelo liso. Ella no tiene un pañuelo de seda blanco como la nieve en sus manos, como las otras princesas, porque ella de ninguna manera es una dama, pero un simple trabajador, una lengua azulada de fuego se enrosca sobre su cabeza.
Un paisaje rocoso ligeramente aburrido se pinta plano, como si fuera un paisaje, un telón de fondo teatral. Contra su trasfondo, Las imágenes de retratos femeninos se ven especialmente expresivas y psicológicas.
El estándar de los murales del templo
Era típico que el artista creara obras monumentales y a gran escala, quizás, por lo tanto, después de un tiempo le escribió una carta a Prahov, ofreciendo sus servicios en la pintura de la nueva iglesia de San Príncipe Vladimir en Kiev.
Pero primero, en mayo de 1885, el maestro pasó por Varsovia y Viena directamente a Italia, para conocer de primera mano las obras de famosos maestros del Renacimiento. Volviendo al final del verano en Kiev, el artista se dedicó inmediatamente a crear bocetos preliminares. Tuvo que completar completamente la nave central, junto con el ábside del altar, cúpula y otros fragmentos de pared con una superficie total de unos tres mil metros cuadrados. Más tarde, M.V. Nesterov, COMO. Mamontov, M.A. Vrubel, los hermanos Svedomsky y otros pintores se unieron a Vasnetsov. Pero fue precisamente el estilo de Viktor Mikhailovich el que se volvió decisivo en los murales de la catedral.
El pintor creó las imágenes de “Nuestra Señora con el Bebé”, ubicado en el ábside sobre el altar, la composición de varias figuras "El Juicio Final", hecho sobre la entrada a los coros de la iglesia, y los principales frescos "temáticos":"El bautismo del príncipe Vladimir" (1885-1896, el arte del Museo Estatal Ruso, Kiev) y "Bautismo de Rus" (1885, Galería estatal Tretyakov, Moscú). Para crearlos, el artista volvió a leer The Tale of Bygone Years varias veces, absorbiendo todas las características descritas de las iglesias de Korsun.
Después de todo, El príncipe Vladimir fue bautizado en una de las ciudades de Crimea sometidas a él:Korsuni, inmediatamente después fue repentinamente golpeado por la ceguera. Vasnetsov pudo reflejar perfectamente las características psicológicas de los héroes, creando una impresión emocionante de la curación milagrosa del príncipe que exclama en oración extática:"¡Ahora he visto al Dios verdadero!" En la mismísima cúpula de la iglesia, el pintor colocó una imagen de medio cuerpo del "Cristo Todopoderoso" (1885, Galería estatal Tretyakov, Moscú). El evangelio abierto está en su mano izquierda, y su diestra se levanta para bendecir. Detrás del rostro sereno y divino de Cristo, un cielo oscuro y estrellado, cubierto con una ligera neblina de nubes.
Cabe señalar que las pinturas del templo del pincel de Vasnetsov tienen una cierta planitud en la ejecución de los fondos. El autor utilizó esta técnica para armonizar figuras volumétricas con planos de pared. Como ya se señaló, todos los murales del templo fueron pintados en diferentes épocas por diferentes artistas. Para crear una imagen completa y holística del templo, cada fresco está enmarcado por un marco decorativo diseñado por Vasnetsov, que es una decoración cuidada y fantástica en su expresión.
En el propio Vasnetsov, Las tramas con imágenes canónicas fueron creadas de una manera estrictamente académica, pero las imágenes de los santos rusos se acercan al arte popular. En el boceto "El Hijo Unigénito del Verbo de Dios" (1885-1896, la Galería Estatal Tretyakov, Moscú), vemos rasgos art nouveau manifestados en las fuerzas celestiales aladas y la figura verdaderamente mística del Señor.
Por todo el grandioso trabajo de pintar la Catedral de San Príncipe Vladimir, Vasnetsov tardó unos diez años. Una parte importante de este tiempo el artista vivía solo en Kiev, sin amigos y familia, aunque a veces le ayudaba su hermano menor Apollinaria. El pintor atraía constantemente a muchos de sus amigos para trabajar:Serov, Polenov.
El éxito indiscutible de los murales del templo de Vasnetsov causó sensación. La prensa de finales del siglo XIX dedicó numerosos estudios y artículos a los frescos. Las imágenes y tramas de los iconos y murales de la Catedral de Vladimir ganaron extraordinaria popularidad, más tarde, se repitieron muchas veces en muchas iglesias en construcción en Rusia. Pero un poco mas tarde a principios del siglo XX, cuando se publicaron los descubrimientos y estudios dedicados al ícono ruso antiguo original, Comenzaron a sonar críticas muy negativas en relación con las pinturas cristianas de Vasnetsov. Pero, a pesar de esto, la creación de un gran conjunto de pintura, encarnado en la asombrosa integridad de la impresión hecha por la decoración de la Catedral de Vladimir, sigue siendo de gran importancia para el arte ruso.
Inmersión en un cuento de hadas
Volviendo a Moscú en 1891, Vasnetsov compró una pequeña parcela de tierra en la calle Meshchanskaya (en la tercera calle Troitsky) y comenzó a construir su propia casa. El maestro diseñó el boceto de la casa él mismo, pero contrató a un arquitecto profesional para que le diera vida a esta variada torre-palacio. Durante este período, el artista volvió a crear sus épicas pinturas de cuentos de hadas.
La trama de la obra "Ivan Tsarevich sobre el lobo gris" (1889, la Galería Estatal Tretyakov, Moscú) tomó Vasnetsov del libro popular del siglo XVIII que habla de Iván el Tsarevich, su novia Elena la Bella y el lobo gris. El artista representó el momento del vuelo del estrecho a horcajadas sobre un fiel animal, que se eleva a través de una flecha a través de lóbregos pantanos y un denso bosque.
La conciencia de la posible persecución da determinación a los héroes, pero el difícil viaje ya ha dejado su huella en los rostros cansados de los enamorados. Ivan Tsarevich, con un caftán de brocado bordado y guantes negros, se aferra a Elena la Bella, vestida con un delicado vestido de seda azul. Todos los detalles indican la velocidad de movimiento del lobo. En la distancia, a través de los gruesos troncos de los árboles, puedes ver el cielo azul. Y junto a los protagonistas de su cuadro, el artista representó flores blancas de un manzano silvestre, que se convirtió en un símbolo de la ubicación de la naturaleza mágica para los jóvenes amantes.
El pintor presentó esta obra en la XVII Muestra Itinerante, celebrada en San Petersburgo y, finalmente, recibió críticas favorables tanto de colegas como de críticos. Ahora, la fama de Viktor Mikhailovich como artista talentoso ha llegado a su clímax. Vasnetsov recibió el título de profesor de pintura, convertirse en miembro de pleno derecho de la Academia de Artes de San Petersburgo.
El artista continuó creando pinturas sobre temas históricos y folclóricos nacionales, creando incansablemente en el estudio de su nueva casa de Moscú. “Sirin y Alkonost. Canción de gozo y dolor ”(1896, pág. Galería estatal Tretyakov, Moscú) nos muestra la imagen del alma humana, en el que el bien y el mal, la alegría descuidada de la vida y la inevitabilidad de la muerte coexisten juntas. Las aves del paraíso Sirin y Alkonost, tienen hermosos rostros femeninos y cuerpos de aves, con alas enormes y patas depredadoras con garras. Sus imágenes se encontraron por primera vez incluso en bordados eslavos antiguos, adornos de metal y madera, datan de los siglos X-XII y en el adorno de mampostería tallada de la Catedral de San Jorge, que fue construido en Yuryev-Polsky en el siglo XIII. Este pájaro fabuloso no es la encarnación del bien o del mal, es solo un alma soñadora, aún recordando el paraíso, pero desterrado para siempre de ella.
Vasnetsov también tenía experiencia escenográfica. Por primera vez, el artista probó suerte en el teatro durante la inauguración de la Ópera Privada Mamontov en 1884. El maestro pintó un boceto en acuarela de una torre submarina de la ópera La sirena de A. S. Dargomyzhsky. Los juegos restantes para esta producción fueron hechos por I.I. Levitan. Luego, en 1885, Viktor Mikhailovich diseñó brillantemente la ópera "La doncella de nieve" de N. A. Rimsky-Korsakov, escenificado en el mismo, que se convirtió en el famoso teatro de Moscú.
En el futuro, fue la imagen creada por Vasnetsov la que fue reconocida como el estándar para esta actuación en todo el mundo. Viktor Mikhailovich logró no solo transmitir el realismo y el drama de todas las imágenes fabulosas, sino también para crear una atmósfera única de la leyenda y el verdadero espíritu ruso. La inconsistencia inherente al carácter nacional ruso siempre ha interesado al artista.
Un ejemplo vívido de expresividad psicológica puede considerarse un retrato del "Zar Ivan Vasilyevich el Terrible" (1897, Galería estatal Tretyakov, Moscú), ejecutado de una manera decorativa brillante. El artista entregó su rostro al rey con una expresividad extrema. Este hombre es ciertamente inteligente insidioso, astuto, pero sin embargo es el ungido de Dios en el trono ruso, que se enfatiza en las cimas de las iglesias:la vista desde la ventana de su cámara.
El rey está en la escalinata de su palacio, cubierto con una alfombra roja. Su pie está a punto de pisar el águila bicéfala bordada en la alfombra. El retrato de Iván el Terrible, un pintor que estudió cuidadosamente las reliquias históricas para sus obras, no escribió sobre antiguos párrocos e íconos que representaban al monarca ruso, pero de la imagen creada por F. I. Chaliapin en la ópera Pskovityanka de N. A. Rimsky-Korsakov, sobre el paisaje en el que Vasnetsov trabajó con Korovin.
En 1899, el artista, basado en sus propios diseños decorativos, pinta un cuadro "La doncella de nieve" (Galería estatal Tretyakov, Moscú). En un claro blanco como la nieve de un bosque oscuro y frío con un abrigo de brocado pintado hay una niña confundida:la hija de Santa Claus y Spring-Red, entrando en el mundo de las personas. Esta fabulosa obra se ha convertido en una de las más reconocibles de toda la obra del pintor.
La grandeza del espíritu ruso
Perhaps the most important work of Viktor Mikhailovich Vasnetsov is the large-scale painting “The Heroes” (1881-1898, the State Tretyakov Gallery, Moscow). Almost thirty years have passed from the idea of this plot in the form of a pencil sketch and its finished embodiment on a huge canvas. Even after the acquisition of the work by the famous philanthropist P. M. Tretyakov, who placed it in a public gallery, the painter continued to make his corrections for some time.
It is known that the figures of the three main epic defenders of Russia - Ilya Muromets, Alesha Popovich and Dobryni Nikitich, the master created from sitters, fully dressed in real clothing from ancient Russian knights, borrowed from the storerooms of the Historical Museum.
The hero Ilya from the city of Murom was painted in the estate of Abramtsevo, for this image the overweight Vladimir peasant posed for the artist. The second warrior, Dobrynya Nikitich, became a combination of portrait images of V.D. Polenov, the father of the artist Mikhail and his own self-portrait. The background of the work:high hills covered with dense forests under a gloomy cloudy sky, dense grasses and young fir trees, covered with a pile of gray stones, are a collective image of the Moscow region landscapes with northern Vyatka latitudes and Ukrainian steppes.
The canvas clearly shows that the horse of each powerful hero is similar in character to the owner. Por lo tanto, the powerful black sheep of the fearless warrior Ilya Muromets squint with his bloodshot eye, the white horse of the courteous and cunning Dobrynia sensitively sniffs the wind, while the stunted horse of the distant Alyosha Popovich, who carries a gusli with him, pricks his ears and nibbles the grass. All this makes a general solemn impression of a magnanimous and fearless force, capable of independently and voluntarily protecting their native land from the encroachment of any enemies.
Vasnetsov devoted all the last years of the outgoing 19th century to easel painting, again turning his attention to book illustrations and architecture. The artist, once again, demonstrated the versatility of his talent by creating a project for the Russian Pavilion at the World Exhibition in Paris. According to the master’s project, the pavilion was made in the style of a prince’s tower or palace. The ancient Russian architectural motifs found by the painter were subsequently repeated by him when creating the facade for the Tretyakov Gallery.
Al mismo tiempo, Moscow and Petersburg were preparing for the celebration of the centenary of the birth of the great Russian poet - A.S. Pushkin. In honor of this celebration, it was planned to release a mass of gift editions of the works of Alexander Sergeyevich.
Vasnetsov received an order for registration of the publication “Songs about the Prophetic Oleg”. He was to develop illustrations and ornament for the text.
The works “Meeting Oleg with the Magician” (1899, the State Tretyakov Gallery, Moscow) and “Farewell to Oleg and the Horse” (1899, the State Literary Museum, Moscow) are graphic compositions made in the form of ancient Russian book miniatures. The gracefully bowed heads of long-maned horses, the vivid colorfulness and mystical images of the characters create an atmosphere of epic poetry that is in perfect harmony with the stately lines of Pushkin.
The artist also performed, emphasizing the decorative capital letters and endings, thus giving the whole work the style of a handwritten medieval book. This only emphasizes the fact that Vasnetsov’s fabulous nature was not only the plot of the canvas. Almost everything looks magical in his work. Even his separately painted landscapes.
The painting “Northern Land” (1899, State Russian Museum, St. Petersburg), in which we see a gloomy, mossy coniferous forest and a blue winding river, as if covered with a thin layer of ice, shows us the atmosphere of ancient northern tales. The uneven horizon, the high angle of the image and the great realism of writing create a true and capacious image of the endless native land. Sin embargo, the anthropomorphic shape of many trees, the viscosity of the gray-green earth and the general condition of the landscape give the impression of magic and mystery of this harsh nature.
A pesar de que, it is known for certain that absolutely all of Vasnetsov’s landscapes have a real open air beginning. Many elements of mystery in landscape backgrounds, signs of the past and archaeologically accurate details were used by many other artists in their genre paintings, but only Vasnetsov’s Russian past is depicted not as reality, but as a real fairy tale.
Ornaments and intonations
In Vasnetsov’s work “Bayan” (1910, State Russian Museum, St. Petersburg) we see a trident, which is attended by heroes, a gray-haired narrator, a hussler and a young prince. The choice of characters does not happen - it symbolizes the transmission of epic narratives by word of mouth, for centuries, from father to son. The background landscape of the picture is rather arbitrary, but the artist meticulously worked out the armor and vestments of all the warriors, as well as beautiful ornaments on their capes, boots and trousers. In the embroidery of the white shirt of Bayan, we recognize the ancient Slavic motif that Vasnetsov had previously used to create costumes of the Berendeys for the opera Snegurochka. Absolutely everything, and the Bayan’s harp, and the wooden brother, and his glass of wine, and even the gravestone have a variety of patterns and symbols. A magnificent ornament to which the master in each of his easel work, He attached great importance to architectural developments, illustrations, and even church wall paintings, is his peculiar individual “handwriting”, which he sacrificed, quizás, only in his only work. En 1917, a surprisingly gloomy and at the same time dynamic, powerful painting “Baba Yaga” was written (V.M. Vasnetsov’s House-Museum, Moscow).
On the canvas, amid the predatory intertwining branches and tree trunks in a mortar with a broom, a terribly grinning Baba Yaga rushes along. The witch has an armpit holding a barefoot frightened boy, an owl flies nearby, bulging huge eyes, and bones and skeletons of dead animals are visible below, on a swampy shore.
There are only three bright light spots in the picture - the white shirt of an innocent child, the lilac-pink reflection of distant conflagrations and the voluminous red skirt of a half-naked witch. The color of the skirt is symbolic and it was not by chance chosen. The work was created in the year when the October Revolution took place in the country, most likely it carries in itself the emotional attitude of the artist to these terrible events.
He loved the patriarchal way and life of his country, deeply believing Vasnetsov, did not accept the new socialist system. Workers and peasant women, who actively advocated for the power of the Soviets, laid bare their shoulders and brought elements of the red flag into the costume. This is what the artist displayed in his picture. It is very symbolic that evil spirits seem uncomfortable, only on one knee, sitting on the edge of a stupa, its rapid flight looks very convincing.
Revolutionary and military events took place in the country, but the master continued to create canvases on his favorite epic plots. True, the crimson-red colors in his palette are now much more intense. The artist painted with them a blazing fairy-tale sky and a monster with a flame belched by wickedness, such as in the work “The Fight of Dobryny Nikitich with the seven-headed Serpent Gorynych” (1918, V. Vasnetsov’s House-Museum, Moscow). Vasnetsov does not show the face of a knight, because in a battle with an unknown force he can no longer be fearless and confident. In the upper part of the canvas, we see a gray-green scaly snake with a predatory clenched paw, intertwined with long necks and toothy mouths. The contrast of dark green and some dull red color underlines the atmosphere of tension.
Famine began in the country. Viktor Mikhailovich began to lack not only canvases and paints - there was nothing to heat the house and the workshop with. In Moscow, residents gave away their family valuables and rarities for a piece of bread, but the painter continued to paint.
The canvas “The Frog Princess” (1918, V. Vasnetsov’s House-Museum, Moscow) became another work on a fairy-tale theme, in which despair that gripped the artist was clearly read. The princess, having thrown off frog skin, is dancing frantically, dressed in a green brocade dress, while balalaika players and guslars enthusiastically play their instruments. The young girl is in a painted red tower, everything around is painted with various shades of this color, down to the clothes of musicians. The princess stands with her back to the observer, so that her dance is “directed” towards the open bright space of the terrace. Allí, in the distance, on the opposite bank of the river, you can see the village and fun festivities by the water. Geese swans flying high in the sky, bowing their long necks in the direction of the girl, fill the atmosphere of unrestrained fun with alarm and drama.
Vasnetsov, who was one of the best religious painters, in 1922, when the leadership of the country of the Soviets began active atheist propaganda, took up the restoration of the Holy Trinity Church on Samotechnaya Street.
The artist still enjoyed recognition. En 1924, his canvases on mythological and fairy-tale stories were selected by the government commission and sent to participate in an exhibition of Russian art in America. The master continued to participate in the life of the motherland, but in his works there was no longer any Russian power, no courage, no dynamism and selflessness.
The figures of the protagonists of the painting “Carpet-Aircraft” (1919-1926, the House-Museum of V. M. Vasnetsov, Moscow) - Ivan Tsarevich and Elena the Beautiful, flying against the background of an alarming scarlet firmament, look absolutely motionless and sad, although, according to the plot of the tale, lovers have just fled from enemies. The idea of escape is also the main one in the work of Sivka-Burka (1917-1926, V.M. Vasnetsov’s House-Museum, Moscow). But for some reason, a magic horse, capable of one jump into the high tower, even though his rider flutters a caftan from a gallop, looks frozen and unnatural.
The same theme of detachment and sadness is felt in the painting “Tsarevna-Nesmeyana” (1916-1926, the V.M. Vasnetsov House Museum, Moscow), and in the painting “The Sleeping Princess” (1900-1926, the House-Museum B M. Vasnetsova, Moscow). The latter depicts a beautiful wooden palace surrounded by a dark forest. And the princess on her snow-white throne, and her servants, and birds, and animals, are immersed in an unbroken dream. The plot of the picture is an alloy of two similar literary works:The Sleeping Beauty by S. Perrot and Tales of the Dead Princess and the Seven Knights by A. Pushkin. Vasnetsov’s decorative talent manifested itself unusually vividly, because everything was decorated with patterns and ornaments here:the princess’s luxurious brocade outfit, and the costumes of her servants and buffoons, and black-and-white dresses, and a little sarafan dress for a little barefoot girl who fell asleep right on the steps embracing “Pigeon” a book. "
Even the bed on which the princess spun fateful yarn has a patterned back, richly decorated with carvings with images of deer, leones griffins and alkonosts. Pillars, paredes platbands, arches and other architectural elements of the palace-tower are decorated with various bright colors and covered with all kinds of patterns. The abundance of symbolic details, such as the fallen spindle or brocade shoe of the young princess, a stake stuck in the ground with a black cloak and a goat’s skull, even a berdysh and the hero’s helmet lying at a distance, as well as poppies that sprouted through the slots of the floorboards, are called to tell us about what preceded the sad event.
Only the painted human faces depicting the bride and groom, as well as decorating the central pillars of the terrace, give hope for the awakening of the princess when, finalmente, the knight who is dear to her heart arrives here. These ancient Russian ornamental animals and plant motifs, which were previously used by the painter in other works and even in the decoration of temples, are combined here into a single magical symphony of color and expressive elegant rhythms and lines.
The end of the tale
All the work of Viktor Mikhailovich Vasnetsov, subject to the law of ancient Russian beauty, became an important stage in the development of the Neo-Russian style in national art, from which our modernism subsequently arose. The painter said:"Everything great in art, which has become universal, has grown on national soil." Vasnetsov’s works had a huge impact on a whole generation of painters, and the epic and fabulous images embodied in his paintings later became the basis of many visual-plastic solutions in our domestic cinema.
The brilliant painter, decorator, illustrator and architect Viktor Mikhailovich Vasnetsov passed away in his house in Moscow on July 23, 1926. He is buried in Vvedensky cemetery, and the works he created became a national treasure, reflecting the heroism and depth of soul of our people.
